Tal vez esté un poquito pasado de moda. Me refiero a que la nueva problemática nuclear gira en torno a que paises no alineados con las democracias del norte desarrollen programas de armas nucleares. Paralelamente de esta cuestión está la cuestión del contrabando de armas nucleares de ex-potencias nucleares como la URSS con grupos terroristas que quieren atentar contra los Estados Unidos.
Voy a dar un pequeño paso atrás para señalar un problema que ya no es una amenaza, aunque nunca dejará de serlo, y algunas cuestiones que debe preocuparnos sobre esto.
Las armas termonucleares son bombas que se detonan a temparaturas extremadamente altas y liberan una asombrosa cantidad de energía.
Dicho en simple, es una bomba que se detona con una bomba atómica. Una bomba atómica como la que estalló en Hiroshima o Nagasaky son tan solo el fusil de esta arma termo nuclear.
Lo que quiero señalar con esto es que hubo un momento de nuestra historia reciente del siglo XX donde la carrera nuclear no se detuvo allí sino que escaló a la guerra termo nuclear.
Aquí me interesaría señalar el elemnto perberso de las fantasías que alentaron estos programas. La verdadera amenaza era que los gobiernos de las potencias nucleares estaban en manos de psicóticos y esquizofrénico.
La complicidad de los científicos es otro elemento importante a considerar aquí. Uno generalmente tiene un ideal romántico de los científicos dedicados a la labor de la verdad.
Quienes llevaron a cabo -en última instancia- estos dispositivos fueron los científicos.
Existe un elemento que tiene que ver con la fascinación. Es fácil entender que hay cierta perversidad, si no al menos sadismo, en un desea que quiere llevar a cabo estas cuestiones. Aún así, es díficil no ser absorvido por la fascinación a la luz de un fenómeno -que aunque catastrófico- de dimensiones asombrosas.
La tensión.
Que prevalezca el amor.
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Voy a dar un pequeño paso atrás para señalar un problema que ya no es una amenaza, aunque nunca dejará de serlo, y algunas cuestiones que debe preocuparnos sobre esto.
Las armas termonucleares son bombas que se detonan a temparaturas extremadamente altas y liberan una asombrosa cantidad de energía.
Dicho en simple, es una bomba que se detona con una bomba atómica. Una bomba atómica como la que estalló en Hiroshima o Nagasaky son tan solo el fusil de esta arma termo nuclear.
Lo que quiero señalar con esto es que hubo un momento de nuestra historia reciente del siglo XX donde la carrera nuclear no se detuvo allí sino que escaló a la guerra termo nuclear.
Aquí me interesaría señalar el elemnto perberso de las fantasías que alentaron estos programas. La verdadera amenaza era que los gobiernos de las potencias nucleares estaban en manos de psicóticos y esquizofrénico.
La complicidad de los científicos es otro elemento importante a considerar aquí. Uno generalmente tiene un ideal romántico de los científicos dedicados a la labor de la verdad.
Quienes llevaron a cabo -en última instancia- estos dispositivos fueron los científicos.
Existe un elemento que tiene que ver con la fascinación. Es fácil entender que hay cierta perversidad, si no al menos sadismo, en un desea que quiere llevar a cabo estas cuestiones. Aún así, es díficil no ser absorvido por la fascinación a la luz de un fenómeno -que aunque catastrófico- de dimensiones asombrosas.
La tensión.
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